Rusia sufrió tres brotes separados de ántrax este verano debido a la descongelación del permafrost ártico, y no un solo brote, como anteriormente se creía.
La enfermedad se ha visto propagada por la acción de tábanos y mosquitos.
En todos los casos, las infecciones se debieron a que las esporas de ántrax llevaban décadas atrapadas en el hielo del permafrost y volvieron a despertarse a medida que se descongelaba el hielo.
Los científicos, que han destacado el papel de los insectos en la difusión del Ántrax, han advertido que toda la región de la península de Yamal en el Ártico ruso es «peligrosa en términos de ántrax» y subrayan el riesgo potencial para muchas otras áreas, a medida que el permafrost se descongele al subir las temperaturas.
Los expertos dicen que los tres brotes de Ántrax totalmente independientes entre sí, se debieron a la tierra contaminada con ántrax ‘zombie’, congelado de brotes producidos durante la era de Stalin o anteriores, en lugar de proceder de viejos cementerios, como se creía anteriormente.
Las infecciones han provocado la infección de 25 personas y la muerte de un niño de 12 años de edad, junto con 2.349 renos y al menos cuatro perros muertos.
El primer brote de la enfermedad se extendió a distancias de hasta 12 millas del epicentro, por culpa de la acción de moscas y mosquitos.
Inicialmente, las autoridades rusas habían hablado de una sola epicentro.
El primero fue en el lago Pisyoto el 7 de julio, mientras que un segundo brote se produjo unos 62 millas al sureste en Novy Port, en el Golfo de Ob.
El último punto donde se detectó la infección el 3 de agosto, fue en Pyakyakhinskaya en el distrito de Tazovsky, 155 millas al este de la infección original.
Fuente: http://www.mirror.co.uk/news/world-news/arctic-thaw-blamed-three-new-8750972